Ayer estuvieron aquí los padres de Marijose, la otra vez que vinieron no pudieron ver a Raúl, sin embargo ahora han podido estar con él. Las caras eran para verlas; además también venía Yolanda y ya os podéis imaginar que la “segunda mamá” de Raúl actuó de inmediato.
Bailaron juntos, le dio de comer, luego bajamos un ratito a la calle y estuvieron jugando… Lo único que lo pone como una moto (de más cilindros de los que tiene) y siempre terminamos con un pequeño-gran mosqueo porque hay que frenarlos a los dos.
De todas maneras es muy bonito verlos juntos.
1 comentario:
Es increible la energía que tiene Raúl, compraría la mitad para mi jejejej. Seguid así.
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