jueves, 29 de enero de 2009

Un gran bajón

Esta mañana tuve que salirme de la clase y dejar a mis alumnos porque iba a empezar a llorar, de hecho me he pegado una gran "pechá" de llorar, lo bueno es que me ha servido para recargar las pilas (aunque la pena sigue ahí).

Es muy difícil ver la clase de infantil de 3 años y no acordarte de que tu hijo debería estar en la suya, haciendo lo mismo que los niños que estás viendo.

De todos modos esto es así, y estoy seguro que vendrán otros momentos mejores.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola Pablo Jesús:

Soy Fernando, un amigo de María José.
El miércoles día 28 cuando vi a Raúl con su madre me llegaban continuamente imágenes de mis hijos a la cabeza porque por unos minutos me imaginaba que podría pasarnos a nosotros, pero conforme fui hablando con tu mujer me fui centrando en la conversación al ver como mantenía una gran fortaleza humana y una inimaginable paciencia.
Paciencia y fe en la pronta mejora de Raúl es la todos tenemos que mantener, ya que todo a su alrededor empieza a funcionar con la campaña que habéis iniciado (que es perfecta) y que muchas personas vamos a seguir de cerca.
Solo quería que supierais que lo estáis haciendo muy bien, y que muy pegados a ustedes tenéis una gran cantidad de buenas personas que van a colaborar con la donación de medula y con cualquier detalle que os haga falta.
Estamos a vuestra disposición.

Os deseamos la recuperación más rápida para Raúl y una fuerte dosis de ánimo para vuestra familia.
Un abrazo.

F.C.